![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIHAoE1C-yL2FVR3-2m9gAXYjFNk5yw6Da74r04SYI72wEro8SSX7_-jkPvehJulhW7ih01_X4faYL1K_FELqUQwcwtb4iArHRizb-ak86_p8ItKkgYykB2IkdCZh0yMFHxiTIThyFeKY/s400/magic+jonshon+cafre!!!.jpg)
No hubo sorpresa, se cumplieron los pronósticos y los históricos Tar Heels de Carolina del Norte ganaron por paliza de 83-69 a los Wildcats de Villanova para disputar el título nacional de la Final Four del baloncesto universitario de la NCAA, a los Spartans de Michigan State.
La primera semifinal había dejado el triunfo por 82-73 de los Spartans sobre los Huskies de Connecticut, que aunque llegaban como cabezas de serie número uno, nunca pudieron con el mejor juego de conjunto del equipo del estado de Michigan que tuvo también a su favor el factor campo.
Michigan St. decide en la segunda parte:
Si en el primer tiempo, los Huskies tuvieron alguna opción de luchar por el triunfo, en el segundo el dominio y la superioridad de los Tar Heels fue permanente y sólo al comienzo de la segunda parte lograron ponerse a cinco tantos con un parcial de 50-45.
Pero surgió la figura del alero Danny Green con dos triples consecutivos y una canasta de dos puntos que volvió a poner las cosas en su sitio.
El base Ty Lawson con 22 puntos y el escolta Wayne Ellington aportó 20 more para liderar el ataque de los Tar Heels, que jugaron en algunos momentos mejor baloncesto que muchos equipos de la NBA. Tyler Hansbrough, que llegará a la NBA la próxima temporada, aportó un 'doble-doble' de 18 puntos con 11 rebotes para ayudar a los Tar Heels a volver a la lucha por el título nacional después que la pasada temporada cayeron eliminados en las semifinales ante los Jayhawks de Kansas. Hansbrough se convirtió en el sexto máximo encestador de todos los tiempos en el torneo de la NCAA con 307 puntos.
Por su parte, los Wildcats esta vez no pudieron hacer historia como en 1985 cuando contra todos los pronósticos ganaron el título nacional al vencer en las Hoyas de Georgetown y el pívot Patrick Ewing.
Esta vez, su rival no le dio opción para tuviese la más mínima posibilidad y más después de ver como sus jugadores claves en el ataque no tenían la mejor noche para acertar sólo 5 de 27 intentos y un 32,9 por ciento de efectividad en los tiros de campo.
Su figura, el base Scottie Reynolds, lideró el ataque con 17 puntos, pero acertó sólo 6 de 18 tiros de campo, incluidos 3 de 11 triples, y 2-3 desde la línea de personal, para repartir cinco asistencias.
Una final llena de recuerdos:
El duelo del próximo lunes entre los Tar Heels y los Spartans le servirá a los segundos para la revancha de la derrota humillante que sufrieron el pasado diciembre cuando ambos equipos se enfrentaron también en el mismo escenario del Ford Field, de Detroit, y paliza de 98-63.
"No me acordaba de eso", comentó Roy Williams, el entrenador de los Tar Heels. "Sabemos que nosotros jugamos muy bien, muy bien esa noche".
Williams, que llega a su segundo partido por el título de la Final Four en seis años, reconoció que el enfrentamiento del lunes será muy diferente.
El entrenador de Carolina del Norte, que buscará su quinto título nacional, el primero desde la temporada del 2005, reconoció que esta vez nadie dentro del equipo se confió y aprendieron la lección de la eliminación del año pasado.